Al mirar esta foto me recuerda el dicho, “Un dibujo vale más que mil
palabras.” ¿Qué conecta al hombre viejo
y las aves? ¿Es posible que sea el amor
bondad?, un estado tan gentil que literalmente llega a ser uno con la
naturaleza, atrayendo a las creaturas a venir y unirse dentro de la sombrilla
de paz y humildad. ¿Podría también ser
el traspaso de la empatía grande? Al
saber qué es para ser un ser vivo que debe constantemente buscar la comida para
vivir, el caballero viejo comprende y comulga.
Camina en los pies de otros. Su
compasión es grande, y no espera. Sus
visitantes reconocen que su presencia es segura y satisfecha. Las lecciones compartidas aquí no requieren
un vistazo rápido o dos, pero sí la contemplación profunda. Al ver profundamente a través de los ojos del
entendimiento verdadero, haciendo la conexión más sentida, empezamos a captar
su mensaje de tranquilidad, unidad, y pureza.
Juntado con la claridad, un agradecimiento a la vida sube, mostrándonos
que los seres vivientes, aun aquellos que son agresivos y competitivos, pueden
vivir en grupos. Tal vez, aun deseamos
que los líderes del mundo se despierten a estas verdades profundas y perspicaces.